Aunque ambos conceptos están relacionados con la gestión del desempeño, no son lo mismo. En realidad, se complementan para formar un sistema integral que conecta la estrategia con la ejecución diaria.
Hoy, los OKR’s son reconocidos por empresas como LinkedIn, Twitter, Dropbox, Spotify, Microsoft, Amazon y Airbnb, como una de las herramientas más poderosas para gestionar el crecimiento organizacional, especialmente en entornos cambiantes.
Los KPI’s o Indicadores de Desempeño permiten identificar datos clave para medir el nivel de cumplimiento que se tiene en torno a los resultados clave establecidos.
Con este enfoque, logramos que los OKR’s den dirección y los KPI’s aseguren el control,
generando un círculo virtuoso de planeación + ejecución + resultados.
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